Nada fácil su gestión y hoy también es blanco de las críticas izquierdistas. Sin embargo la señora Áñez se comprometió a llamar a elecciones libres y antes de un año cumplió. Hubo elecciones y ganó el candidato de Evo, Luis Arce.
“Hay una corriente liderada por el señor Nicolás Maduro que busca desestabilizar gobiernos establecidos en América”, afirmó Arturo Murillo, ministro de Gobierno.
El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Carlos Orellana, presidió la ceremonia, a la que asistió el ministro de Defensa, Luis Fernando López.
Si la señora no entiende en qué país nació, puede ser peor que Evo, o algo peor que es traer a Evo de regreso… ¿o es que los militares bolivianos no son indígenas o mestizos? ¿Se calarán sus insultos?
Diana Gámez escribe que en 14 años se desarrolló, en formato gigantografía, “el ego de Evo”. “Tan grande, como para ordenar la edificación de su propio museo para honrarse a sí mismo y practicar el culto a su personalidad”.
Pretendió un cuarto mandato y llamó a un plebiscito para modificar las normas que lo impedían. Fracasó en su intento. Los bolivianos dijeron no va más. Pero Evo no les hizo caso y el Tribunal Constitucional en otra de sus originalidades resolvió en base a una decisión de la Corte Interamericana.