El domingo, Maduro participó en un acto en el que celebró los dos meses de su adjudicación presidencial. Desde allí se despachó en insultos hacia los líderes del PP, Isabel Díaz Ayuso y Alberto Núñez Feijóo.
En el acto apeló nuevamente a los insultos contra algunos opositores, pese a que es uno de los aspectos prohibidos como propaganda electoral por atentar contra “el honor, vida privada, intimidas, propia imagen, confidencialidad y reputación de las personas”.
Se esmeran en afinar los vituperios con los que aspiran causarle el mayor daño posible, a esos atrevidos de la UE que los castigan sin justificación.