
En los casi 900 folios de la acusación, que se suman a los 19 mil de la investigación, el expediente que el Ministerio Público luso construyó relata la participación de decenas de venezolanos en el esquema. La Fiscalía finalmente se abstuvo de imputarlos, bien por carecer de pruebas contundentes que eventualmente pudieran convencer al tribunal, o por considerar que sus posibles infracciones ocurrieron fuera de la jurisdicción portuguesa.