César Mayora era sargento primero de la Guardia Nacional Bolivariana. Fue detenido el 18 de diciembre de 2019 por funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
En el marco de la jornada de marchas convocadas por la oposición de cara a la juramentación presidencial, ciudadanos reportan amedrentamiento y represión por parte de funcionarios del Estado.
Según los reportes, el fuerte tráfico comenzó a la altura del peaje de Hoyo de la Puerta, conocido como Tazón, producto de una alcabala de cuerpos de seguridad del Estado, en la que también habrían participado funcionarios de la Dirección de Contrainteligencia Militar.
“Por una parte te hace sentir seguridad en la calle, pero por otra no sé si están para generar miedo, por lo que se avecina el 10 de enero”, expresó un mototaxista.
“Libéralo, quiero verlo antes de irme (…) Deja que Carlos me vea antes de irme que me siento mal. Él necesita un médico donde está, libéralo que es inocente”.
Mofarse de un paquete legislativo, rusticano, represivo, regresivo, vergonzoso, objeto del repudio del mundo civilizado es nocivo para la salud. Por menos que eso ya han asesinado a mansalva, millares y millares de disidentes.
Este 20 de diciembre se conoció de un nuevo arresto en el estado Yaracuy contra el activista de Vente Joven.
Las aprehensiones se conocen luego de que Vente Venezuela denunciara la desaparición de Ramón Bejarano, activista de derechos humanos y coordinador regional de asociaciones ciudadanas de la organización con fines políticos en el estado Bolívar.
El Departamento de Estado también informó que está tomando medidas para imponer nuevas restricciones de visas en virtud de “la Proclamación Presidencial 9931 a las personas afines a Maduro que han socavado el proceso electoral en Venezuela y/o son responsables de actos de represión”.
Familiares de detenidos aseguraron que los atropellos incluyeron maltratos físicos, destrucción de pertenencias personales y privación de alimentos.