
Una interrogante sobre la que parecería que nadie debería tener dudas. Sin embargo, como se está viendo, no es tan así.
Por iniciativa de Estados Unidos y sus aliados, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó esta medida con 93 votos a favor, 24 en contra y 58 abstenciones.
Desde 2019, el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas ha solicitado permiso al Estado venezolano para hacer una visita en terreno. La petición fue reiterada en abril de 2020 pero no han recibido el visto bueno de las autoridades. | Foto Naciones Unidas
En Afganistán se prohibió a las niñas mayores de 12 años asistir a la escuela en muchos lugares del país, mientras numerosos departamentos de protección de la mujer fueron desmantelados.
¡Que los violadores de derechos humanos sean sus mismos jueces en la ONU, en nada difiere con lo que el pueblo de Venezuela hace en 1999! Con votos autoriza a Hugo Chávez para que sepulte la moribunda Constitución de 1961 y asuma como dictador, hasta para cambiarle el nombre a la república, modificar los símbolos de la patria, y legislar a su arbitrio como lo hace su causahabiente, el Milosevic del Caribe.
Los crímenes de lesa humanidad y su juzgamiento son hoy para la ONU una cuestión política total. Que el Derecho y la justicia tengan inspiración política, nadie lo duda; pero ¡cuando la política es todo, nada es política!
Durante su discurso a las delegaciones ante la Organización de Naciones Unidas, el parlamentario instó a considerar una estrategia “que contemple nuevos escenarios”, luego de agotada la vía diplomática.
Lo aberrante a todas estas, es que, la ONU, ahora le permita al régimen usurpador de Maduro acreditarse para ejercer una representación que no tiene.