
“No se sabe cuándo se acabará ese prolongado calvario. Los pacientes previamente se encomiendan a José Gregorio Hernández para que interceda ante Papa Dios, a fin de que les ayude al momento de llegar al hospital y algún recurso consigan para salvarse”.
Para el doctor Jaime Lorenzo, la misión, en lugar de ser usada como un instrumento político, debería ser reformada para funcionar estrictamente dentro de los márgenes de la medicina preventiva y ayudar a que los hospitales no estén saturados de pacientes.