En Bolívar comer sigue siendo más caro que en el resto del país. La caída del consumo por bajo poder adquisitivo provocó la desaceleración de los precios en dólares como una estrategia de las empresas para garantizar rotación de inventario ante pocas ventas.
Fedecámaras Bolívar reportó que el leve aumento del costo de los alimentos en los últimos meses no se debe a una desaceleración de la inflación, sino a que la caída del consumo por el bajo poder adquisitivo de las personas obligó a los empresarios a disminuir márgenes de ganancia para garantizar la rotación de sus inventarios.
La canasta alimentaria pasó a costar de 511 dólares en promedio a 480 dólares en un mes. En febrero, los bolivarenses necesitaron 89 salarios mínimos para costearla.
El Ejecutivo no ha dado anuncios oficiales sobre un posible ajuste del salario mínimo, el cual se mantiene en Bs 130 desde marzo de 2022. Tampoco hay declaraciones al respecto por parte del Consejo de Vicepresidentes Sectoriales ni del actual vicepresidente Sectorial de Economía, Tarek El Aissami.
En febrero de 1993, Correo del Caroní entrevistó a varios ciudadanos para conocer cuáles creían ellos eran sus necesidades en el marco del 41 aniversario de Puerto Ordaz.
Los protestantes aseguraron que han consignado más de 50 documentos en los diferentes organismos competentes en materia laboral con el fin de alcanzar avances. No obstante, estos no cumplen con su deber de dar respuesta a los casos.
El gremio busca precisar tres factores: el costo de la canasta básica, el porcentaje de inflación de los precios en dólares y en bolívares, y el nivel de escasez de productos a fin de precisar el costo de vida real en Bolívar.
La jornada amparada por la OIT se vio empañada por la exclusión de grupos laborales no afectos al gobierno y porque las decisiones tomadas no se traducen en mejoras de las condiciones de vida de los trabajadores.