
El Gobierno ha reconocido que fue un “fallo” del dispositivo de seguridad al también candidato republicano a la Casa Blanca y hay varias investigaciones en curso para descubrir cómo pudo suceder.
El Servicio Secreto, que cuida al republicano por ser exmandatario, informó en un comunicado que “se encuentra a salvo” y que hay una investigación en curso sobre lo sucedido.