“Los reclusos aseguran que su lucha es pacífica, por lo que piden la presencia de la ministra de Asuntos Penitenciarios, Celsa Bautista, un representante del Ministerio Público o defensores de derechos humanos”.
Cuando dudamos de todo y de todos y el pesimismo nos arropa, sería bueno que encontráramos razones para agradecer, como parte de una “terapia de aguante”.