Fátima Sequea, hermana del capitán Antonio Sequea, condenado a prisión por su participación en la Operación Gedeón, alzó su voz por lo que ocurre en la cárcel El Rodeo I, donde familiares desconocen la situación de los presos mientras estos claman por auxilio desde sus celdas.
Los regímenes que recurren a la tortura de menores infringen principios fundamentales de dignidad y humanidad que dejan cicatrices profundas y duraderas en las víctimas: daños irreparables en su salud mental y emocional, afectando su capacidad para llevar una vida plena y productiva.
La dirigencia sindical sostiene que, ante la parcialidad de las instituciones laborales del país, deben pedir ayuda a instancias internacionales en materia laboral y de derechos humanos. | Foto José Rivas