La compañía tiene un pasivo laboral de 1.4 millones de dólares en concepto de liquidación a sus empleados, quienes exigen el pronto cumplimiento de la deuda para solventar sus compromisos.
Son 185 familias las que se han visto afectadas por el impago de la compañía ubicada en Puntarenas, al respecto, los obreros han enviado misivas al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, solicitando justicia en el caso, hasta ahora no ha habido respuesta.