Joe Biden explicó que el líder de Al Qaeda representaba el número 2 del entonces dirigente del “grupo terrorista”: Bin Laden.
El presidente norteamericano aseguró que la misión nunca fue “construir una nación”, sino evitar que Afganistán atentara contra Estados Unidos. También advirtió a los talibanes de una respuesta con “fuerza devastadora” ante cualquier ataque a su personal militar o diplomático.
La estatocracia socialcomunista ha elegido aliarse con transgresores y facinerosos, sus socios preferentes, sancionados y cuestionados por la comunidad internacional.