
Se espera, de acuerdo a las estadísticas, que el 2022 sea menor al promedio porque ya el 2021 superó las cifras promediadas.
Alimentarse es cada vez más difícil en un país hiperinflacionario, donde el salario mínimo oficial sigue anclado en 1.200.000 bolívares, cuando adquirir una canasta de 60 productos alimenticios tiene un costo de 282,6 dólares. | Foto William Urdaneta
Un país que ha visto arruinar sus empresas públicas, que vive las consecuencias del saqueo más brutal y que ha sido sometido a la devastación de su economía no puede creer en la eficacia de un régimen tan incapaz.