Buenos Aires.- Reflexivo y didáctico en sus respuestas, Enrique Macaya Márquez (Buenos Aires, 1934) no ha perdido un ápice de su pasión por el fútbol, ni siquiera tras convertirse en el periodista deportivo que ha cubierto más Mundiales de forma consecutiva en la historia: 17 en total, desde Suecia 1958 hasta Qatar 2022.
«Ni me lo planteé», reconoce el comentarista argentino, quien en una entrevista con EFE desgrana sus más de siete décadas de trayectoria en prensa, radio y televisión, en las que ha presenciado las tres Copas del Mundo ganadas por la selección de Argentina y ha sido testigo privilegiado de la evolución de este deporte.
«Hay muchos intereses que el fútbol ha potenciado y que antes no existían, y ahora existen, vaya si existen; tienen tanta influencia que pueden modificar las cosas y pueden cambiar las cosas. Cambió la esencia. Es otra cosa», subraya Macaya en los estudios de la productora Torneos en Buenos Aires.
De Malmö a Doha
Macaya define su primera experiencia mundialista como «un hecho absolutamente casual». Mientras trabajaba para Radio El Mundo, un exjefe suyo le propuso viajar a Suecia y cubrir el Mundial para otra emisora, Radio Belgrano. Tenía 23 años y muchísimas ganas de comerse el mundo.
«Era un sueño, yo no había viajado más que a Montevideo una vez, y ahí era al sur de Suecia, a Malmö. No sabíamos dónde quedaba ni cómo viajar», asevera el presentador, que recuerda esa ciudad como «un lugar en donde la gente iba a tomar baños termales, con una tranquilidad absoluta», lejos de los focos mediáticos del fútbol actual.
Pasaron los años, las décadas y las oportunidades en radios, revistas, periódicos y televisiones, siempre con un ojo puesto en el fútbol internacional, hasta consagrarse en Qatar 2022 como el periodista con más Mundiales en su haber; un reconocimiento otorgado por la propia FIFA en el transcurso del torneo.
«Tiene mucho de accidental, porque nadie puede decir que puede programar la cantidad de Mundiales que yo cubrí», señala con humildad.
En ese tiempo, Macaya vivió en primera persona la transformación del periodismo deportivo, cuyos representantes pasaron de ser unos «enamorados del deporte», «subyugados por lo que era el fútbol» y por comprenderlo en todas sus dimensiones, a estar obsesionados por la tecnología, considerada como un «referente indubitable».
«Es una locura, porque dicen ‘dio 200 pases bien’, ¿quién te asegura que están bien hechos los pases? Está bien estar informado, saber que un jugador puede rematar tantas veces al arco; ahora, eso no resuelve los problemas que tiene el juego», constata Macaya, para quien un buen periodista, ante todo, debe «saber hablar».
Los tres mundiales de Argentina
A lo largo de su carrera profesional, Macaya ha relatado los tres Mundiales conquistados por la Albiceleste: Argentina 1978, México 1986 y Qatar 2022, títulos que «fueron diferentes» entre sí, asegura, por los contextos de la selección en cada momento y por la idiosincrasia de sus entrenadores.
«Yo valoro mucho la capacidad de (César Luis) Menotti, pero tuve más cercanía con (Carlos) Bilardo», apunta Macaya, deshecho en elogios hacia el combinado del ‘Doctor’, cuyos jugadores, entre ellos Diego Armando Maradona, «tenían una gran disciplina y estaban sumamente convencidos» de lo que tenían que hacer sobre el césped.
Respecto al equipo de Lionel Scaloni, Macaya no puede ocultar su sorpresa por un resultado «casi milagroso» en el Mundial 2022, fruto de los esfuerzos de una selección «que se fue formando de una forma extraña», con futbolistas que «no han jugado mucho en los equipos del campeonato argentino».
«El equipo se unió y se produjo un doble fenómeno: el rendimiento del equipo futbolísticamente y cómo hizo sentir a (Lionel) Messi, como líder del grupo. Fue un fenómeno esta selección, realmente una cosa extraña, pero muy interesante como para analizar y encontrar una explicación coherente», manifiesta el periodista.
Un Messi cuyo liderazgo en Catar fue comparado con el del propio Maradona; similitudes que Macaya prefiere obviar, porque son futbolistas «diferentes».
«Messi es un excelente jugador y una excelente persona; además, Diego tuvo la desgracia de entrar en la droga, es decir, son casi incomparables (…). De todas maneras, futbolísticamente han encontrado muy buenos resultados a su trabajo», opina un Macaya que tiene muy claros cuáles son sus ‘cracks’ favoritos: Alfredo di Stéfano, Johan Cruyff, Pelé y, por supuesto, Maradona.
Tras haber relatado el triunfo albiceleste en Lusail, Macaya tiene pocos sueños por cumplir dentro de la profesión, aunque no cierra las puertas a cubrir el que sería su decimoctavo Mundial: México, Estados Unidos y Canadá 2026.
«No sé, ya estoy grande… Vamos a ver. Uno exige cada vez más comodidades para trabajar», afirma Macaya, quien a sus 88 años se siente «conforme» con lo que hizo como periodista.