Roma.- El Inter de Milán empató 2-2 este domingo en el campo del Roma y dejó el Scudetto en bandeja al líder Juventus, que tiene cinco puntos de ventaja sobre la segunda plaza y que juega este lunes contra el Lazio, en una trigésima cuarta jornada de la Serie A en la que el Nápoles doblegó 2-1 al Udinese y calentó motores con la mirada puesta en el cruce europeo con el Barcelona.
En un cruce entre Roma e Inter, rivales del Sevilla y del Getafe en la Liga Europa, rico de goles, el belga Romelu Lukaku firmó el 2-2 definitivo en el 88, un resultado que sin embargo no sirve a ninguno de los dos equipos y que favorece al Juventus, que jugará este lunes con cinco puntos de ventaja sobre la segunda plaza.
Pese a llevar tres partidos sin ganar, el Juventus puede sentenciar la victoria de la Serie A contra el Lazio, después de que ni el Inter ni el Atalanta, tercero, que empató contra el Hellas Verona, consiguieran aumentar la presión.
Este domingo en el Olímpico romano, el Inter se adelantó gracias al holandés Stefan De Vrij, pero perdió agresividad y fue remontado por el Roma, con dianas de Leonardo Spinazzola, con polémico por una anterior falta romanista al argentino Lautaro Martínez, y el armenio Enrikh Mkhitaryan.
Una ingenuidad de Spinazzola en el 85 provocó el penalti que Lukaku, que entró en la reanudación en sustitución de Lautaro, anotó el 2-2. Fue el gol número 21 de su campaña, el decimocuarto lejos de San Siro, todo un récord en Italia.
De ganar el Juventus al Lazio este lunes, el equipo de Maurizio Sarri se escaparía a ocho puntos de distancia a falta de cuatro jornadas para el final.
No tiene opciones de meterse en «Champions» el Nápoles, pero ya está seguro de jugar la próxima Liga Europa al ser campeón de la Copa Italia y estos últimos encuentros ligueros le sirven para prepararse de cara a la visita al Barcelona en el Camp Nou, prevista el 8 de agosto.
Este domingo, los hombres de Gennaro Gattuso tuvieron que sufrir para doblegar al Udinese, que se adelantó a los 22 minutos gracias al séptimo gol de la temporada, el octavo fuera de casa, del argentino Rodrigo De Paul.
Pero el Nápoles del último período es un equipo vivo, con confianza en sí mismo, y pese a perder por lesión a su líder ofensivo, el belga Dries Mertens, logró sobreponerse a las adversidades y dio la vuelta al marcador con un gol del polaco Arkadiusz Milik y una diana espectacular de Matteo Politano, en el minuto 94.
Pudo pasar de todo en la reanudación, con el Nápoles que sacudió el larguero con un potente disparo del polaco Piotr Zielinski desviado por el meta argentino Juan Musso, y el Udinese que rozó la ventaja con una vaselina de De Paul desviada hacia la madera por el senegalés Kalidou Koulibaly.
El Nápoles ocupa la sexta posición, empatado con un Milan que sigue volando. Consiguió 20 de los últimos 24 puntos disponibles y arrolló 5-1 este sábado al Bolonia en San Siro.
La trigésima cuarta jornada ya dio un primer veredicto definitivo: Tras tres temporadas, el Spal de Ferrara descendió matemáticamente a la Serie B al perder 2-1 en el campo del Brescia.
Esta derrota, unida a la trascendental victoria del Génova en otro choque directo por la salvación contra el Lecce, determinó su descenso.
El equipo genovés triunfó 2-1 ante el Lecce con un gol del paraguayo Antonio Sanabria y un desafortunado tanto en propia puerta del meta brasileño Gabriel Vasconcelos en el minuto 80.
En los otros encuentros disputados este domingo, el Sampdoria doblegó 3-2 al Parma, tras remontar un 0-2 adverso, y ya está seguro de salvarse mientras que el Fiorentina doblegó 2-0 al Torino.