Baltimore.- El abridor venezolano Eduardo Rodríguez tuvo un retorno triunfal al montículo tras recuperarse de la miocarditis provocada por el coronavirus que le impidió jugar la temporada 2020 y ayudó a los Medias Rojas de Boston a ganar por 7-3 a los Orioles de Baltimore, que perdieron en su debut como locales.
El dominicano Rafael Devers y el puertorriqueño Kiké Hernández, una de las adquisiciones de los Medias Rojas durante el descanso invernal, aportaron sendos cuadrangulares a los Medias Rojas, que han ganado cuatro partidos consecutivos, algo que no lograban desde el periodo del 14 al 18 de agosto de 2019.
Devers, que ocupó la tercera base, lideró la ofensiva de los Medias Rojas al irse de 3-2 con par de carreras anotadas e impulsadas.
La reacción de Boston se ha dado además después de haber comenzado la temporada regular con blanqueada en su campo, del Fenway Park, precisamente frente a los Orioles.
Boston ha anotado 33 carreras de manera combinada en sus cuatro victorias, tras registrar cinco en la barrida frente al equipo de Baltimore.
Un día después de cumplir 28 años, Rodríguez apareció por primera vez en las Mayores desde el 29 de septiembre del 2019, cuando enfrentó a los Orioles en Boston.
El venezolano comenzó la campaña pasada en la lista de los lesionados tras sentir adormecido el brazo durante la pretemporada.
Rodríguez (1-0) cedió tres carreras en cinco entradas, aceptó cuatro imparables, incluidos jonrones de dos carreras de Ryan Mountcastle en la primera entrada y del dominicano Pedro Severino en la cuarta, y ponchó a siete rivales con una base por bolas. Su recta alcanzó los 152 kilómetros por hora.
La derrota fue para el abridor Matt Harvey (0-1), que aguantó cinco entradas en el montículo y fue castigado con siete imparables, cuatro carreras limpias, dio una base por bolas y abanicó a cinco bateadores rivales.
Los seis bateadores latinoamericanos de los Medias Rojas que jugaron en el partido aportaron un combinado de seis carreras anotadas y cinco impulsadas.