Maracaibo.- Cardenales de Lara se impuso 9-7 en el segundo juego de la doble tanda dominical a Águilas del Zulia para así arrasar en la serie de tres juegos de fin de semana en el Estadio Luis Aparicio “El Grande”, barrida que envió a los rapaces al último lugar de la tabla clasificatoria y colocó de nuevo en la punta a los dirigidos por Carlos Mendoza.
Zulia, desde el pasado jueves, suma cuatro derrotas seguidas a domicilio y ante este nada alentador panorama, el martes iniciará una gira de seis juegos, que les llevará por Maracay, Caracas, Puerto La Cruz y Barquisimeto. De no regresar de la misma con récord positivo, el equipo sumará una nueva campaña sin llegar a la postemporada.
Águilas realizó otra de sus comunes remontadas, luego de comenzar abajo 5-0 en el propio primer inning, cuando su abridor, el zurdo dominicano Porfirio López, se vio impotente contra los pájaros rojos. Empero el club reaccionó y en el cierre del quinto ganaba 7-5. Pero un error en disparo del torpedero Deiner López, le dio al Cardenales la oportunidad de empatar para luego decidir el encuentro.
Los vencedores sonaron 10 imparables contra nueve de los anfitriones. Pero el pitcheo aguilucho se mostró generoso al otorgar seis boletos y la defensa del equipo cometió los dos errores ocurridos en este desafío, que, pese a ser de siete actos, tuvo duración de 4 horas 23 minutos, con 2.345 aficionados en calidad de asistentes.
Lara, que inició con el zurdo Héctor Rodríguez, necesitó de cinco brazos para cubrir la ruta. El último de ellos, el dominicano Cristofer Ogando (1-0) se apuntó la ganancia.
Por el lado zuliano, hubo desfile de nueve lanzadores y la derrota recayó en el zurdo Luis Moncada (1-1), el séptimo en el orden comenzado por el quisqueyano López.
Cardenales ubica su récord en 26-16, mientras que Águilas cae a 18-26, ocho juegos por debajo de la línea de .500 puntos.
Magallanes dejó en el terreno a los Tigres
Valencia.- Yadier Molina lucía desencajado cuando en el séptimo inning subió a la loma del Estadio José Bernardo Pérez de Valencia para quitarle la bola a Eduard Bazardo, luego de ver perder la mínima ventaja, que hasta ese momento tenía Navegantes del Magallanes sobre Tigres de Aragua.
Bazardo recibió jonrones consecutivos de José “Cafecito” Martínez y Denis Phipps, antes de abandonar el montículo tras un doble de Carlos Rivero. El timonel boricua le dio la responsabilidad al dominicano Yaramil Hiraldo de contener a la ofensiva bengalí, pero un sencillo de Carlos Tocci dejó la pizarra 7-5 a favor de la visita. A partir de ahí, el rostro del estratega comenzó a tomar otro semblante.
En la apertura del octavo, el mexicano Alex Tovalín subió al morro y fue capaz de mantener el marcador tal como estaba. Y en el cierre, Renato Núñez despertó de un letargo con el madero para sacudir estacazo contra Jorgan Cavanerio, con Maikel Serrano en circulación, para igualar 7-7.
Fue entonces cuando entró en escena desde el noveno episodio Enderson Franco, el protagonista de la velada que le devolvió la sonrisa a Molina y a la carabela en pleno.
Franco actuó por espacio de tres innings. En el primero, vio como Alberth Martínez daba un salto sobre el borde de la valla del jardín izquierdo para robarle -al menos- un extrabase a Dennis Ortega para el último out.
En los dos siguientes, no creyó en corredores fantasmas y otros cuentos de la cripta. No le sacaron la bola del cuadro interior. En el décimo le lanzó una recta centelleante a Rayder Ascanio, que por poco lo desarma, cuando entró a hacer el relevo posicional en la primera base por un toque de Carlos Tocci, que movió a Yorman Rodríguez a la antesala, pero de allí no pasó. Rodados de Yonathan Mendoza y Henry Rodríguez finiquitaron la amenaza.
Para el undécimo, Johan López -corredor emergente por Rodríguez- también llegó a tercera con un roletazo de Alexi Amarista a la intermedia, pero Franco ponchó a Carlos Arroyo, luego decidió caminar de manera intencional a Eduardo Escobar y se fajó con Phipps, quien rodó hacia las paradas cortas para completar un nuevo cero con out forzado en segunda. ¿Seguiría el apagafuegos dictando cátedra una entrada? Lucía improbable, pero no se pudo comprobar.
Con Arquímedes Gamboa en segunda; Arturo Nieto tocó la bola, Alberto Callaspo desde la intermedia saltó hacia el medio del diamante para tomarla, y ante la seña del careta bengalí que le indicaba tirar a tercera, lo hizo, pero la esférica fue a parar hacia el jardín izquierdo. Nada que hacer, Gamboa anotó la de dejar en el terreno a la manada aragüeña 8-7.
Dividieron honores
En una jornada dominical con tres series a doble juego, los Tiburones de La Guiara y los Caribes de Oriente dividieron honores en la capital.
En el primer partido, los orientales se impusieron por 8-6, pero los salados se quedaron con el segundo encuentro con pizarra de 5-3.
Lo mismo sucedió entre Bravos y Leones en Macuto. El primer partido fue para los isleños con pizarra de 7-4, pero luego sucumbieron ante la “manada” por 13-6 para el segundo partido. lvbp.com